Estoy a punto de empezar mi participación en la Asamblea Nacional por la Educación. Estoy participando en una mesa de trabajo dedicada al tema de "Renovación pedagógica desde las TIC y el estudiante como sujeto activo".
El moderador de la mesa es Diego Barragán, uno de los relatores se llama Ingrid y el mapista (el personaje que construirá mapas conceptuales) se llama Guillermo.
Aunque me produce mucha pereza el tener que estar en estas sábado, domingo, lunes y martes (festivo ), me parece muy interesante poder participar en este proceso.
A mi juicio, esta mesa está un tanto saturada con personas que hacen parte del equipo del MEN. Están aquí Marta Tirado y Maritza Rondón, entre otros. También veo a una persona del equipo de educándote, quienes están representando a Virtual Educa en Colombia.
Ya llenamos una encuesta (una encuesta más) que busca evidenciar (eso dice) los actores, sentidos y tendencias de los participantes en la Asamblea. Tendencias?
Como por variar, estamos arrancando tarde. Se suponía que el inicio era a las 8:00, y ya son las 9:00 y estamos llenando la encuesta. Me pregunto cómo será la dinámica de este proceso, pero supongo que una vez la haya identificado, estaré más cómodo en el proceso de discusión.
El Plan tiene 10 temas principales, todos de alto interés. Sin embargo, algo que me inquieta (habiendo leído de nuevo, adicionalmente, el documento de Visión 2019 para el sector educativo), es que mucha de la reforma tiene un énfasis muy alto en cómo la educación termina al servicio de lo laboral exclusivamente. Me inquieta que la lógica que está detrás tiene que ver con la generación de riqueza y competitividad, en la "pertinencia laboral", sin detenerse a pensar en cuál debería ser el sentido de fondo del proceso educativo. A mi juicio, no se trata en realidad de formar trabajadores, sino de permitir a cada persona lograr su verdadero potencial. Se trata de dar elementos axiológicos y filosóficos que nos permitan ver más allá de "las buenas noticias del entretenimiento" y que nos habiliten para comprender y eventualmente, transformar nuestro mundo. Se trata, también, de permitirnos ser felices.
Si la conexión lo permite, estaré blogueando en vivo. Si no lo permite, trataré de publicar en diferido al final de cada día.